En el humo del ultimo cigarrillo de la noche disuelvo mi cuerpo. Esperando poder dormir con algo de peso en el colchón y no levitar en un arrebato de histeria de la gravedad. Ya no tengo espíritu, me lo sustrajeron y con él las ganas de seguir siendo visible, palpable, las ganas de seguir Siendo..
Ahora todo lo que llena mi mente, mis venas, mis pulmones es voluble como el tiempo y tan difuso como mañana. Soy una caja de resonancia llena de niebla y en mi misma hago eco y me aturdo. Soy una caja llena de humo, eso es todo lo que soy y un par de piernas y ojos mentirosos que habitan en el silencio sepulcral de mi habitación. El mundo ya no emite sonido. Y lo contemplo esperando, a que el humo se disipe y finalmente mi cuerpo quede tendido inconciente.
4 comentarios:
Te juro que me siento así & la foto dice todo.. Un besito linda*o*
me encantó este texto!
me identifico mucho.
salutes!
Me encantó tu blog! Te sigo ♥
Aunque no lo veas, el humo necesita de vos para existir, y eso ya es mucho. Un gran beso.
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