domingo, 24 de abril de 2011

Informe de una mujer acorralada

Estoy bajo prisión domiciliaria, algo que definitivamente no puede ser legal. Me fueron usurpados mis derechos, a elegir sobre todo y mi libertad, no tengo celular, me hackearon el facebook y me sacaron toda mi plata. Tengo poco tiempo porque me vigilan, supongo que esto no durará demasiado.
Cómo se puede amar a alguien y hacerle la vida tan dificil, hacerla sufrir tanto. Deberían quererme como soy y no tratar de cambiarme, de curarme como si padeciera algún tipo de enfermedad.
Soy su hija, no un objeto, no un pedazo de plastilina al que le pueden moldear un camino, una cabeza y hacerla caminar como se les antoja. Y eso siento que soy, un objeto sin ningún tipo de poder sobre mi misma.
Si quieren llevarme por el "camino de la luz" yo no puedo ver claramente, tengo la cabeza quemada, fui manipulada, no al parecer jamás tuve capacidad de razonamiento. 
Cuando me di cuenta de que no tenia ninguna via de escape, pensé en suicidarme, porque realmente no tengo una vida que vivir, estoy poseida y robotizada, viviendo una vida lineada por parámetros arcaicos. Pero lo pensé mejor y realmente quiero ver qué sucede ahora, no puedo rendirme y dejar que se salgan con la suya, porque sí, ni con una hija muerta reaccionarían, simplemente buscarian culpables.
Ya vienen. Si esto es una guerra entonces la voy a pelear porque ahora tengo algo que vale la pena el sacrificio. No pienso rendirme. Ella lo vale.

jueves, 14 de abril de 2011

Paradoja

Atrapada en aquel pequeño cosmos, la vida se le escabullía entre sus manos poco a poco. Decidir. El tiempo corre, el tiempo.. mata. Modificar el presente y encender una luz al futuro. Pero que tan pisado está el pasado? La arena nunca deja de caer, una y otra vez en diferentes direcciones. En sus pupilas dibujaba universos, anulaba la niebla.
No podemos deshacer lo que ya está hecho.
La existencia es un proceso que jamás comprenderemos, si acaso logramos dominarla. En la mente elegía perderse. La verdad que esconde la mentira, la mentira detrás de la sonrisa. Una premonición predice la traición y al fin encontrar el culpable, sus propias manos.
Nos congelaremos en un instante, en que miramos hacia arriba y la gota de lluvia ya no cae.
El calor húmedo que recorre la piel, el aroma metálico se apodera de la escena otra vez, una memoria, miles, el placer, la carcajada.  El circulo cierra y vuelve a empezar, ya encontró un pretexto. La espera termina. y comienza una nueva.