domingo, 30 de mayo de 2010

Ella

Sentía que cada vez más frecuentemente que había algo malo en su cabeza. Todos esos sueños no podían significar nada en absoluto y ahora esta liberación mental que la hacia sentir tan bien, tan irremediablemente plena, ir admitiéndolo gradualmente y largar una carcajada casi frenética al aire y que se repitiera una y otra vez en las paredes de aquella casa solitaria. No habia para ella nada más satisfactorio que encontrarse alli consigo misma y nadie más que ella y su reflejo desnudo en el vidrio que ya estaba empañado por su lenta y acompasada respiración, sin la censura del arrepentimiento, sin el terror de abrir los ojos, sin el dolor de una mentira, de fingir ser alguien que no era y tratar de convencerse de ello y a su vez ese sentimiento contrarrestado por esa profunda verguenza que fundía sus colores con la culpa y el miedo como una pintura al óleo del mar. Como nubes cuando se avecina una tormenta.

Quisiera poder hacer que su mente se borrara completamente y dibujar ella misma sus memorias, elegir una tiza y dibujarse a si misma de la forma en que ella quería verse, contorneando el mundo que ella veia con los ojos cerrados.
Y mientras una lágrima gira por su cara y estalla contra el marmol frio ella grita.
Satisfacción, placer, miedo, verguenza, confusión. Todo se arremolinaba ante sus ojos entrecerrados y ella gritaba. Todos esos días de introspección finalmente mostraban su lado oscuro, pero al fin se mostraban. Salían a la luz y ella era un océano de confusiones y a su vez certezas. O acaso eran certezas confusas?
Sin nada que protegiera la fragilidad de su cuerpo de niña finalmente convertida en mujer y el más fuerte y resistente que yo haya conocido jamás, ella levanta los brazos, su piel llena de dibujos creados por la mano de una adolescente asustada, ignorada, rebelde y muda. Ya no hay vuelta atrás piensa y rie haciéndose eco en la blancura. Relaja su cabeza hacía atrás, dejandose llevar hacia el éxtasis.

jueves, 27 de mayo de 2010

Y entonces revolucionó su vida...

Despierta como nunca antes. No estaba segura de si era causa de café o de las recientes revelaciones internas.
Se agarró fuerte al almohadón de seda y cerró los ojos esperando dormirse pronto. 5,4,3 preparándose para el despegue, 2,1 Cero. Turbulencia. Mareo. Caida libre. Abrió los ojos. No, no tenia sueño. Habia caido en la cuenta de que no necesitaba dormirse para poder viajar. Porqué conformarse con una proyección efímera, cuando tenía toda la vida y las capacidades para hacerlo todo en la realidad. O eso que todos llamaban realidad, lo palpable.
Entonces miró panetrando en la oscuridad de su  habitación y todo estuvo más claro que nunca. No se iba a quedar más en aquella ciudad de inocentes y mentirosos, en la letanía de una frecuencia a la que no pertenecía, una velocidad en la cual su aceleración la hacia parecer agonizante. Una ciudad en la que ya nadie pensaba. Porqué debia hacerlo? Acaso nuestro propósito en la vida no es la búsqueda de la felicidad, como decia Platón? Entonces qué la obligaba a quedarse allí? Entre el ruido, el humo y el cemento, cuando no lo toleraba, cuando cada vez que miraba un poco a su alrededor se deprimia y volvia a encerrarse en si misma, en un lugar que había creado para huir de aquel lugar que tanto odiaba.
No necesitaba plata, tenia brazos y piernas, cuerdas vocales. Nada la detenía. No necesitaba computadora, tenia una birome y papel. Su abuelo no habia gozado de los beneficios del sedentarismo al que estamos sometidos y esta facilidad de hacer absolutamente nada.
Trató de imaginar algo que la atara a aquel lugar, pero no se le ocurrió nada, no habia razón que evitase que ella desapareciera de allí. No tenia nada que le llamara lo suficientemente la atención como para quedarse.
Entonces pensó en aquel chico al que ella habia considerado un psicópata y eliminado totalmente de su vida. Una vez más un hilo de pensamiento los unía. Los unía la necesidad de huir a toda costa. El ya habia empezado el recorrido y un dia ella se topó en su camino. Pero ella, siempre tan similar al humo, se evaporó a  la primera sospecha de acercamiento.
Tal vez era un enfermo, pero ella nunca habia sido comprendida. Y ahora ambos tenían un rumbo incierto.
Si, lo tenian, pero no era el mismo rumbo. Era una incertidumbre que tenia que recorrer sóla. Iba a ser su viaje.
Pensó en aquel otro hombre que habia sido suyo por mucho tiempo. Acaso lo nesecitaba a él.?Acaso nesecitaba a alguien? Hasta donde sabia, la gente sólo la confundía. Podria arreglarselas por sí misma.? Y se respondió que sí. No estaba lista para amar, es más, dudaba de tener la capacidad para hacerlo.y podria vivir sin ese orgasmo que nadie habia logrado darle aún. Porque sóla podría conseguir una satisfacción mucho mayor que la que otra persona podría darle. El placer de sentirse fuerte, el de ver y sentir y conocer lugares que nadie habia visto antes. La realización de la mente y el alma, mayor que cualquier otra satisfacción física.
Y ya más desvelada que nunca, su mente comenzó a trabajar a toda velocidad. Podía escuchar el rechinar de los engranajes. Lo planificó todo.
1) Necesitaba un trabajo. Ahorraria algunos billetes. Tenia que comprar los materiales: Bolsa de dormir, para montaña. Carpa, mochila, linterna (una de verdad) Equipo térmico y algunos alimentos no perecederos. Todavia pensaba en una brújula.
2) Dedicaría un año a estudiar el arte de la supervivencia.
3) Compraría un pasaje en micro hacia el norte del país. Apartir de alli, haria lo que el destino le deparara y viviria con lo que la naturaleza generosa quisiera poner en su camino.
Tendria poco, pero ganaría mucho más. Realmente necesitaba todo eso? Porque lo que vería no tendria precio. El ser humano ES por sus experiencias. y ella iba a revolucionar su propia vida, porque podía hacerlo.
  Esa noche revivió en ella algo que hacia rato habia perdido: El espiritu de aventura, las ganas de vivir y la capacidad de asombro. Esas cosas por las cuales nos juzgan niños, cuando son ellos los que en su interior llevan a un ser maduro y despierto. Ella no quería ser adulta. Cuando crecemos es como si  cerraramos los ojos, porque no vemos más allá, no imaginamos, nos limitamos a lo que nos rodea. Crecer no es madurar, muchas veces es enceguecer.
Ella derribaria todas las paredes. Quería ver paisajes hermosos y conocer seres extraordinarios y no iba a perder un segundo más de su vida. El tiempo no se detiene a esperarnos.
Equipada con lo que mencioné dos parrafos arriba y con un cuaderno y lapicera, lo escribiria todo y así lo volvería inmortal. Balanceaba la posibilidad de agregar una filmadora, aunque eso seria romper con el parámetro que se habia puesto, de no llevar tecnología mas solo vivir de la naturaleza. Pero quién necesitaba parámetros a esas alturas?
En el invierno de ese año iria al norte y en el verano nadaría en lagos del sur y escalaría montañas y deslumbraria sus ojos con la blancura.
Entonces pensó que tal vez se sentiria sola y podria llegar a volverse loca en el silencio absoluto. Necesitaba música y libros. Una guitarra seria dificil de transportar. Buscaría entonces alguna comunindad y viviría entre ellos hasta que necesitara estar sola de nuevo. Porque como dije antes, ella era efimera. Iba y venia cuando quería y nunca se quedaba lo suficiente.
Pensó en su partida hasta quedarse ahora si finalmente dormida. Ya no con una lágrima balanceandose en el rabillos de uno de sus ojos y amenazamdo con secarse y quedarse en su piel para siempre sino con una sonrisa en los labios. Cuando amaneciera habria comenzado la Revolucion, la de su vida. Al fín tomaría las riendas. Porque ella una vez habia querido algo y habia olvidado qué. Pero en aquel preciso momento que ya habia pasado lo recordó y sus expectativas resucitaron. Ahora sabia lo que desaba y solo bastaba con alzar sus brazos y agarrarlo. Y no dejarlo ir nunca.
Y juro que trato de encontrar una explicación valedera para mi depresión que tenga sentido para ella, pero no encuentro ninguna que lo tenga. Ninguna podría complacer a su católica y puritana forma de pensar, y no lo digo de modo despectivo. Me alegro que ella haya podido sobrellevar muchas cosas cuando era jóven, de la forma correcta. Pero no a todo el mundo le hacen bien las mismas cosas.
Cuando descubrieron lo que tenía, se rehusaron a medicarme. Dios sabe porqué. Pero lo único que logran es hacerme la vida más dificil, aunque crean que es por mi bien.
No puedo explicárselo a ella y ni siquiera puedo explicarmelo a mi misma. No puedo mirarla a los ojos y decir: Bueno, tuve una infancia jodida, porque sonaría como una excusa, un peso que convenientemente puse sobre mi hombro para poder así vivir con todos mis miedos y miserias. No es que hubiese sido criada por lobos, o que me hayan golpeado regularmente. No es que haya tenido padres drogadictos o alcohólicos. Ni siquiera infieles según creo.
Tampoco soy un caso excepcional, sólo soy una más del montón de chicos con familias destruidas porque sus padres no supieron decir Basta! a tiempo, o no lo hicieron por asuntos monetarios, codicia propia e intereses personales. "Quien se queda con la casa, quién con los hijos y quién con el perro". Chicos cuyos padres no supieron manejar sus perturbaciones lejos de ellos, para no mortificarlos, para evitar que sean un reflejo de todos sus defectos.
¿Pueden ser las familias las causantes de todos estos problemas o es que nací con el orden de mis neuronas alterado, con algo jodido en mi cabeza, algo que no estaba bien, química o algo en mi naturaleza biológica que fue colocado de manera incorrecta?.
Quién puede explicar como fue que llegué tan lejos y tan mal. No lo sé. Pero el hecho principal es que hubo una época no podía levantarme de la cama, no podía comer, no podía cambiarme la ropa, y lo hacía por más dificil que fuera, para no tener que darle explicaciones a mi madre. Porque si había algo, una sóla cosa que realmente podia matarme de verdad, esa era lastimarla de alguna forma, a ella o a mi hermano. Y ella no lo entiende, cree que me alejo porque la odio, que no hablo porque no confío en ella. Si sólo pudiera saber lo equivocada que está y que todo, todo, yo soy mucho más complicada de lo que ella cree.
Me preguntaste qué era lo que quería y qué esperaba. Te respondí con lo primero que se me cruzó por la cabeza: Quiero que me dejen de hinchar las pelotas.
Siempre tiendo a hacer eso, a ocultar mi lado más profundo, por la falta de ganas de hablar, incluso a vos, la persona a la que se supone debo desnudar mi alma.
A veces debe parecer que tengo problemas de habla, que no me sé expresar, pero no es eso, es algo más, algo que todavía no puedo descubrir. Es uno de esos tantos cabos que aun no até.
Apenas cruzé el umbral de la puerta di con la respuesta, era tan sencilla que me sorprendió y tal vez es por eso que no llegó a mí inmediatamente, por que mi mente tiende a enroscarse y a hacer conexiones sin sentido o por el contrario a quedarse totalmente en blanco, para que luego de mi boca salga un hilo de coherentes incoeherencias. Ya en el ascensor, miré al espejo fijamente y le dije: Lo que realmente quiero es ser feliz. Lo que espero es que me ayudes a lograrlo.
Pusiste tu mano sobre mis ojos y me los cubriste. Me regelaste una rosa del color de la sangre o tal vez más oscura y cubriste de pétalos la cama. De pronto me quedé muda y no supe qué decir exactamente porque ese era el momento, ese en el que todo es demasiado perfecto como para opacarlo con palabras. Te amo, susurré. Y me olvidé de que había un mundo alrededor nuestro, porque todo lo demás era insignificante en comparación.

Mis emociones van y vienen como flashes inconstantes, como pasajeros en un colectivo. Hoy todo esta bien hasta que cae el sol.

El asesinato del anciano y el ejército del bizarro Willy Wonka 3ra Parte.

Con un pie adelante a punto de hecharse a correr sintió que algo se movia a su costado. Miró de reojo y en un horror demencial descubrió que los chicos que estaban tomando cerveza ya no eran chicos y tampoco sostenian botellas de cerveza en la mano. Eran unos personajes que parecian escapados de un circo de mala muerte, altos, del metro noventa no bajaban. Vestidos en trajes que en una época habian sido coloridos y brillantes, pero en ese momento con la luz tenue del farol de la calle esos colores eran desteñidos y opacos. Verde, fuccia, azul eléctrico, turquesa, rojo, amarillo y colores que ella jamas habia visto en su vida, que podrían tranquilamente ser originarios de otro planeta, porque esos matices, definitivamente no eran de esta dimensión.
No comprendía porqué sentia tanto espanto pero no se detuvo a pensarlo. Comenzó a correr.
Ellos caminaban lentamente con aire taciturno casi ido y sin embargo ella apenas los había dejado atrás y ellos le pisaban los talones. Sus ojos estaban secos y no podia siquiera escupir una lágrima que lavara su miedo.
Ya llegando a la vereda divisó a un hombre corpuento de remera a rayas y anteojos grandes y se apuró a abrazarlo. Debía advertirle y él debia ayudarla.
Papá. me persiguen- dijo con su tono de voz alterado unas cuantas notas. Papá, me escuchás? Sacame de acá!! Sacame de acá, quieren castigarme!!
El hombre le agarró el brazo sin decir una palabra y comenzó a apurar el paso. Corrieron hacia la puerta del edificio en el que vivían.
Ellos eran cada vez más. Entraron en el pasillo de la casa. Su padre ya habia subido las escaleras y ella con un lijero vistazo atras, corrió escaleras arriba. La esperaba en el segundo descanso pero no estaba solo. Ella comenzó a temblar incontrolablemente quería saltar y agitar sus brazos. Quería morir que que todo aquello acabara de una vez, pero no podía.
Papá!!! Son demasiados, quieren lastimarme, quieren hacerme algo papá, quieren lastimarme!
Quienes?? Inquirió el hombre, de espalda ancha como un oso. El único que está acá es este pelotudo que no se que quiere.. exlamó señalando al más parecido a Willy Wonka vestido de gris.
Ella no comprendió de qué estaba hablando su padre; como podía ser que no los viera, eran tres no uno y estaban vestidos de colores bastante llamativos para que no los viera, sin mencionar su estatura.  Quizás se hubiese vuelto loco del pánico a aquellas alturas. Necesitaba hacerlo reaccionar o los iban a matar a ambos.
Papá, son tres y abajo hay muchos más. Nos quieren lastimar, Nos.. Miro al de gris que tenia los ojos desviados hacia ella y a los demás con los ojos hacia arriba, como si no estuvieran alli, lo cual les daba aspecto de depravados. Nos quieren... Me quieren a mi!! Comprendió aún más desesperada. Su padre no los veia porque sólo querian que ella los viera, sólo la querian a ella y se la iban a llevar.
Papá! no te quieren a vos, solo a mi. Quieren matarme, quieren matarme, van a matarme!!. Andate, subí y entrá a casa, solo me quieren a mi. Corré!! Gritaba ella desconsolada, ya en la linea que dividia su cordura. Estaba lívida del terror. Presa de su propia pesadilla y nunca iba a parar a su corazón que golpeaba con tanta fuerza contra su pecho que en cualquier momento iba a salir. Su sangre estaba fria.
Dejá de hacer tanto escandalo.. A este le tenés tanto miedo? Le pregunto desafiante su padre con esa vos fuerte y varonil. A éste??
Y entonces agarró al que estaba vestido de gris, al de sombrero alto, por el cuello y lo levanto como si no pesara nada, como si no midiera más de dos metros y no pesara una tonelada. Lo miró un instante a esos ojos desquiciados y lo reboleó contra la pared.
Cayó despatarrado contra los otros dos. Estaban inmóbiles.
Ella sonrió, su padre habia desaparecido. Bajó a toda velocidad las escaleras ya con un poco más de confianza, pero ésta se esfumó al ver  a una chica de no mucha mas edad que ella, de cabellos rojizos, en ropas naranja y amarillas.
No era tan alta como los demás, pero la miraba sobradoramente. Una mano huesuda y putrefacta trataba de colarse por la puerta entreabierta, pero no llegaba a entrar.
A través del vidrio logró divisar centenas de personajes en colores desgastados. Eran un ejercito de alegria muerta.
Caminó solo un paso pero la pelirroja no se movió y la siguió mirando como si esperara algo. Avanzó uno poco más hasta que estuvo lo suficientemente cerca como para sentir su uniforme de seda anaranjado con botones enormes. Tocó su piel y entonces tomó su cara entra sus manos. Ya no le daba tanto miedo. Cerró los ojos con fuerza y la besó.
Al instante sintió un sabor dulce. Un sabor hermoso, y miles de recuerdos borrosos llegaban a su cabeza. Conocia ese sabor y cuanto más presionaba esos labios contra los suyos, más intenso era el sabor. Frutilla.. llegó a reconocer, pero había algo más.
Besó con más pasión aun. Necesitaba descubrirlo, saber que significaba ese gusto.
Comenzó a sentir un cosquilleo en el estómago. Y siguió besándola. Y de pronto recordó, en un segundo comprendió. Ya no habia nadie a su alrededor, todos se habian evaporado. Quería continuar.

Despertate, ya son las nueve... Escuchó una voz a lo lejos. O pensás seguir de largo?? La cena va a estar en diez minutos.
Dio vuelta en su cama apretando con fuerza su mano a la almohada. Abrió los ojos y se levantó de a poco, con el resabio de aquel sabor impregnándole la boca, los labios. Como si se los hubiese pintado una vez más con su labial, aquel que habia comprado durante unas vacaciones a Mar del Plata, a sus ocho años. Un labial dorado.

El asesinato del anciano y el ejercíto del bizarro Willy Wonka 1ra Parte

Se dio vuelta y lo encontró observando detenidamente un oso de peluche gigante que sostenia dos corazones entre sus patitas, aunque no estaba claro qué rezaba la escritura bordada en hilo blanco en ellos. Te gusta no? le preguntó.
Si, siempre me gustó el betún.
Se acercó para mirar el precio enganchado en la cola del oso. $380. Se acerca pascuas pensó, y tengo que regalarle algo que equivalga a todos los regalos que él me dio y aunque puedan verse confundidos mis sentimientos con mi actitud, realmente quiero hacerlo feliz.
Le faltaban $180 para comprar el peluche y  no entendia exactamente qué era lo que sentia pero sabía que él en cualquier momento podia sacar esa plata y comprar lo que quisiera y en cambio ella no lograba decubrir cómo iba a conseguir esa cantidad de billetes en tres dias.
Tenía una tijera en la mano y tomó al oso del estante en el cual posaba.
Ahora veia lo que decian los corazones: I love, estaba escrito en uno. Facebook, en el otro.
Recortó el segundo y se quedó con la patita naranja del oso en la mano, Ya no le gustaba porque una pata era naranja y la otra amarilla.
Comenzaba a sentir ansiedad y se dio cuenta de lo que deseaba en realidad era cortar su propio brazo y no el del peluche.
Volvió a dejarlo en el estante y oyó que el le preguntaba qué habia hecho. Le saqué el corazón que no me gustaba, de todas formas lo voy a comprar, mañana lo paso a buscar asi que no hay problema.
El dijo algo sobre el betún y ella ya harta preguntó: Por qué seguis diciendole betún, es un Panda!! No se que te enseñaban en la escuela.!
Y el comenzó a contarle una historia de su infancia que ahora no recuerdo, pero lo hacía alegremente y ella quedó convencida y dijo entonces es Betún, no Panda.
Y de pronto se encontró a si misma tratando de coser el bracito naranja, aunque no le gustara  y entre tanto el chino dueño del local protestaba diciendo que habia destruido su propiedad y que debia pagar por el oso de inmediato y comenzo a gritar en chino mandarín y ella no entendia una palabra.
Trato de conectarse a facebook desde una notebook que se encontraba en una mesa que ella no habia visto hasta el momento. Al lado podia ver el patio lleno de plantas.
Quiso mandarle un mensaje a su amiga diciendole que iba a llegar un poco más tarde a la casa. Y metió su cabeza dentro de la pantalla porque queria formar parte de la red y viajar hasta el perfil de su amigo invisible y decirle que estaba deprimida de nuevo y que lo necesitaba, pero sin querer se etiquetó en una foto de un desconocido y el sistema empezo a fallar y veia números por todos lados hasta que todo quedó oscuro.
La computadora se apagó. Átrás suyo se encontraba su padre y ella supo que todo iba mal

El asesinato del anciano y el ejército del bizarro Willy Wonka 2da Parte

Cómo se supone que vas a pagar por lo que rompiste y otros reproches más y ella ya estaba cansada. Lo quería mandar a cagar. Le contestó en cambio, que si no tenia plata para comprarle los libros de la facultad, no entendia como se le podria cruzar por la cabeza pedirle plata para un betún. La conseguiría por sus propios medios: Los libros y el regalo.
Salió corriendo de la jugueteria sin volver a mirar ni al chino ni al patio lleno de plantas ni a facebook. Llegó hasta un pasaje oscuro que ella ya conocia muy bien, porque en la esquina se encontraba su local preferido de ropa. Se detuvo a mirar una remera y sintió frio. En frente, sentados con la espalda apoyada en la pared de Banco Provincia y tomando cerveza se encontraban unos chicos de caras borrosas. Algo más en la escena le llamó la atención.
La ventana estaba abierta y veia al anciano sentado mirando la tele. De pronto su mamá estaba a su lado mirando la misma escena pero con otros ojos. Tuvo miedo y no supo porqué pero sabia que algo no era normal.
 Y entonces lo vio. Un hombre de mucha edad, unos cien años aproximadamente. Caminaba encorvado y tenia los pantalones bajos, no lo vio pero sabia que sus genitales estaban expuestos. Lo que sintió fue mucho más que simple miedo, un pánico dificil de explicar. Sintió el peligro. Y el viejo entró en la casa del otro y ella continuó mirando por la ventana porque necesitaba saber qué iba a suceder. Como una película. Miró a su costado y vio que desde la avenida que cruzaba con el pasaje se acercaba un individuo de mucha estatura con un sombrero alto y de traje. Le recordó al hombre extravagante de ojos saltones dueño de una fábrica de chocolates. Pero éste estaba vestido de gris. Una sensacion de vértigo la recorrió.
El hombre viejo ya no miraba la televisión. Ahora estaba atado a su silla y fue en este momento cuando ella se dio cuenta de que nada estaba bien. No habia forma de que lo hubiese atado con tanta velocidad, habia algo en el otro anciano que era macabro. Sus manos temblaron y al mismo tiempo el hombre con los pantalones bajos Alzó una mano y un resplandor plateado mortífero surgió de la misma. Ella ya no soportó mas. Gritó. Su pavor era extremo. Estaba al borde del abismo. Temía enloquecer de terror. Mamá, lo va a matar! Hay que hacer algo! Esta loco! Mamá, tiene un  cuchillo!! Llamá a la policia. Pero su madre estaba abstraida y le tiró el celular. Llamá vos le dijo y salió corriendo.
Su cuerpo temblaba incontrolablemente y apenas podia sostener el telefono. Al primer intento marcó mal: 977. Volvió a intentar: 911
Hola titubeó.
Ya mandamos a la patrulla juvenil le respondió la voz femenina al otro lado, al escuchar su voz adolescente.
No, no es eso. NO no es eso gritaba al borde del espasmo. Mataron a un hombre.
Ah, es otra cosa.
Si, te digo!! Fue un viejo, un viejo de pantalon bajo, entró a su casa. Trató de articular entre un aullido y lloraba. Lo mató.
POR FAVOR VENGAN!! Yo voy a esperar a la patrulla juvenil pero vengan. Nadie entendia lo grave de la situación? Nadie entendia que el terror la habia paralizado hasta el punto de que le doliera cada centímetro de piel? Jamás habia sentido tanto pánico en toda su vida y no comprendía porqué si la situación no la involucraba, por qué se quedó allí? Por qué sentía que estaba a punto de morir ella también? El pasaje estaba muy oscuro, y trató de darle una dirección a la mujer del teléfono pero de pronto toda la pared estaba llena de carteles indicadores. Se decidió por el que estaba más a la esquina. Eran dos, uno abajo del otro.
Estoy en Asamblea y San Nicolás V dijo en un alarido aterrado y cortó.

Besos con sabor a traición y dia de algo nuevo.

Es dificil tomar caminos separados cuando por tanto tiempo caminaron por el mismo tomados de la mano. Quisiera conservar aunque sea un pedazo de su ser, el que él quiesiera darle y sabía que era egoista al pedirselo. Sería mucho más fácil que su vida corriera y no mirara atrás, necesitaba verlo feliz pero era necesario para eso que él mismo viera la realidad, que la viera y la aceptara
Seria tan liberador para ella que él la odiara y con eso la desatara de todo remordimiento.
Hace tiempo que se apagaron las luces. No llego a encontrar el momento exacto en que eso paso, pero un dia X, uno de los hilos se quebró y la tela ya no volvió a ser la misma. El dia en que la piel se lastima y yo le pongo una venda y sigo adelante y trato de simular que estoy intacta, que no duele. El tiempo lo hizo sencillo pero cuando estas cosas pasan, quedan marcas, y tratamos de borrarlas con cremas, parches y tatuajes, y la cicatriz se torna más pequeña y casi imperceptible, pero sigue ahi. La piel nunca vuelve a ser la misma.
Las relaciones son como la piel.
Mientras sus sentimientos eran cada vez mas sólidos y verdaderos los de ella comenzaron a disiparse y entraron entonces en una total desincronizacion. Y el niño-hombre se esforzaba para que lo suyo, lo que compartian, funcionara pero ella ya no podia o no le importaba. No sabia que hacer porque por mucho tiempo no comprendió lo que pasaba, ya estaba acostumbrada a amarlo. Cuando su pasión comenzó a debilitarse era tal la costubre que no lo notó. Le hechó la culpa a su mente indecifrable como solía hacer y se convencio a si misma de que cuando eso pasara todo volveria a ser lo de antes. Pero no lo fue. O acaso cuándo la mente logró dominar al corazón? Sólo los impulsos pueden ser controlados, pero los sentimientos... No, nunca logramos sentir lo que queremos.
Poco a poco las palabras eran escasas, hablaban de que se habian levantado con un pie fuera de la colcha, del café y del perro, del auto que pasó el semáforo en rojo y de un ojo que goteaba y del clima. El maldito clima. La lluvia. Las tormentas la hacian feliz pero él las detestaba.
Y luego de las palabras insuficientes, llegaron los celos. Las palabras eran escasas pero sólo para él. Y ella habia conocido  a la persona con la que podia desnudar su mente y su alma pero esa persona ya no era él. Se formó la amistad más pura y anónima entre esos dos sujetos y él se sentia excluido, Si tan solo lograra comprender qué era lo que se daba en esas charlas de rostros invisibles.
Una tarde muda bajo las sábanas y ella solo sentia que el dolor la penetraba. Si no habia palabras que fueran su música entonces ya nada valia la pena, la pasión se habia evaporado y mientras él pretendía llevarla al climax ella soltaba una lágrima silenciosa y evadia su mirada profunda y llena de expectativas. Qué te pasa preguntó cuando se dio cuenta y ya era tarde. Nada, no me pasa nada. Y era verdad. NADA eso fue lo que sintió, vivió y respiró ella desde ese dia. Y entonces pagó con la misma moneda. Devolvió una puñalada con otra y se sacó un peso de encima de la manera más inmadura que conocia. Entonces dio besos con sabor a traición.
Las palabras eran escasas y excusas.
Hoy era el dia de ponerle un final a esa nada y comenzar desde 0, comenzar algo nuevo. Probar con algo distinto, una amistad quizás. ´Porque ella a pesar de todo no estaba dispuesta aún a perderlo absolutamente. Lo amaba, de otro modo quizás, como a un hermano y a un mejor amigo y solo ella conocia su valor, porque sólo ella sabía que él era la persona más maravillosa del mundo por fuera y por dentro. Era la única conciente de que de él habian surgido siempre los sentimientos más puros y sinceros, como tratándose de un nene. Él tenia el alma joven de un niño.Y ella adoraba verlo sonreir y ver como sus ojos centelleaban cuando lo hacía. Se odiaba por no poder amarlo como él se merecia y jamás se predonaria el no haberle podido dar todo lo que el necesitaba.
Pero ese era el dia de dejar atrás odios y perdones. Era dia de soltar y de llorar las lágrimas nunca lloradas cara a cara. Era dia de que sus labios ya secos se separaran y sus manos frias se desentrelazaran y dia de que sus mentes se unieran. Era hora intentar otro tipo de conexión. Era dia de algo nuevo.
Porque lo que tuvieron fue tan transparente y verdadero, que las puertas jamas se cerrarían entre ellos, no habia chance de que eso pasara. El siempre ocuparía un lugar en el palco principal de su vida y ella siempre seria su primer amor. El dolor algun dia seria superado y al fin sonreirian sinceramente.

miércoles, 26 de mayo de 2010

Es esta sensación que creí perdida que está de vuelta. Volver a esta realidad de la cual trato de escapar constantemtente. Evadirme por un tiempo sólo para regresar de nuevo y cuanto más largo es el período de ausencia, más dolorosa es la llegada.
Tengo un nudo en la garganta, una compresión en el pecho. Siento que no pertenezco a este lugar pero eso ya es sabido. A cualquier lugar al que huyo tengo sentido de pertenencia en tan poco tiempo que es como si fuera una ciudadana de los pueblos. Me siento local en todos lados menos acá.
Despertar en mi cama me lleva a abrir desmesuradamente los ojos con sorpresa y desentendimiento. Desperté y las lagrimas rodaban por mis pómulos sin razón aparente, angustiada por algo invisible. Estoy acá de nuevo.
Volvi a la vida que no es mi vida y la sigo rechazando.

jueves, 20 de mayo de 2010

Fui a la facultad a buscar el resultado del parcial. Fue totalmente inesperado. Me saqué un 8 o.O Yo agradecía si llegaba al cuatro y me saque un 8!!! y encima parece que no fue regalado, porque fue de las notas más altas :B Solo tres nos sacamos eso creo y todos los demás menos. Asique Hasta ahora estoy contenta. Aprendí que tengo que confiar un poco más en mi, tengo la autoestima, como siempre, en el piso.

miércoles, 19 de mayo de 2010

Bueno gente en dos dias me voy a gesell. No puedo esperar para estar en medio de la nada, paz y tranquilidad :D Y se dice que va a llover tmb ♥