Las paredes de este cubo comienzan a estrechar distancias y mis ojos, clavados, impávidos, congelados en esta imagen. Los colores cobran vida, en este empapelado de fotos, tu aliento en mi nuca una vez más.
La lágrima desesperada rompe y corre de su cuenca.Esta canción se repite de los años pasados a los venideros.
Grito y rasguño la solidez de tu espectro... No desaparezcas! Cada vez más voluble; ya no te diviso, no recuerdo y me despedazo. Necesito ver las memorias y ellas fuerzan su propia extinción como fuego de madrugada. Ya no soy. Me aferro a este humo cuyo brillo está completamente apagado. Ya pasó algo más de un año o quizás mi vida y la realidad que alguna vez fue mi certeza se convirtió en algo que no puedo distinguir claramente, solo una leve neblina.
Los tintes de esta ciudad que construí de a poco una tarde de verano ahora tan lejana me corroen y se funden con esta piel de cocaína.
Vivis siempre en mi mente y mi alma resquebrajada, perfumada para siempre con tu escencia, vive un átomo en vos y así espero no morir- El olvido es desaparición y esta vida, este sol que es mi deidad, es ese mismo que vos me diste. esto que soy es lo que vos moldeaste y erguiste para que pudiera pisar mi suelo sin miedo y con seguridad.En este preciso instante un día más me espera, pero yo ya no te espero más, simplemente le suelto la mano a tu recuerdo , a aquel holograma al que nunca supe despedir, te miro fijo al iris mientras das la vuelta y te dirijís hacia tu destino individual. Grito Gracias!