jueves, 27 de mayo de 2010

Y entonces revolucionó su vida...

Despierta como nunca antes. No estaba segura de si era causa de café o de las recientes revelaciones internas.
Se agarró fuerte al almohadón de seda y cerró los ojos esperando dormirse pronto. 5,4,3 preparándose para el despegue, 2,1 Cero. Turbulencia. Mareo. Caida libre. Abrió los ojos. No, no tenia sueño. Habia caido en la cuenta de que no necesitaba dormirse para poder viajar. Porqué conformarse con una proyección efímera, cuando tenía toda la vida y las capacidades para hacerlo todo en la realidad. O eso que todos llamaban realidad, lo palpable.
Entonces miró panetrando en la oscuridad de su  habitación y todo estuvo más claro que nunca. No se iba a quedar más en aquella ciudad de inocentes y mentirosos, en la letanía de una frecuencia a la que no pertenecía, una velocidad en la cual su aceleración la hacia parecer agonizante. Una ciudad en la que ya nadie pensaba. Porqué debia hacerlo? Acaso nuestro propósito en la vida no es la búsqueda de la felicidad, como decia Platón? Entonces qué la obligaba a quedarse allí? Entre el ruido, el humo y el cemento, cuando no lo toleraba, cuando cada vez que miraba un poco a su alrededor se deprimia y volvia a encerrarse en si misma, en un lugar que había creado para huir de aquel lugar que tanto odiaba.
No necesitaba plata, tenia brazos y piernas, cuerdas vocales. Nada la detenía. No necesitaba computadora, tenia una birome y papel. Su abuelo no habia gozado de los beneficios del sedentarismo al que estamos sometidos y esta facilidad de hacer absolutamente nada.
Trató de imaginar algo que la atara a aquel lugar, pero no se le ocurrió nada, no habia razón que evitase que ella desapareciera de allí. No tenia nada que le llamara lo suficientemente la atención como para quedarse.
Entonces pensó en aquel chico al que ella habia considerado un psicópata y eliminado totalmente de su vida. Una vez más un hilo de pensamiento los unía. Los unía la necesidad de huir a toda costa. El ya habia empezado el recorrido y un dia ella se topó en su camino. Pero ella, siempre tan similar al humo, se evaporó a  la primera sospecha de acercamiento.
Tal vez era un enfermo, pero ella nunca habia sido comprendida. Y ahora ambos tenían un rumbo incierto.
Si, lo tenian, pero no era el mismo rumbo. Era una incertidumbre que tenia que recorrer sóla. Iba a ser su viaje.
Pensó en aquel otro hombre que habia sido suyo por mucho tiempo. Acaso lo nesecitaba a él.?Acaso nesecitaba a alguien? Hasta donde sabia, la gente sólo la confundía. Podria arreglarselas por sí misma.? Y se respondió que sí. No estaba lista para amar, es más, dudaba de tener la capacidad para hacerlo.y podria vivir sin ese orgasmo que nadie habia logrado darle aún. Porque sóla podría conseguir una satisfacción mucho mayor que la que otra persona podría darle. El placer de sentirse fuerte, el de ver y sentir y conocer lugares que nadie habia visto antes. La realización de la mente y el alma, mayor que cualquier otra satisfacción física.
Y ya más desvelada que nunca, su mente comenzó a trabajar a toda velocidad. Podía escuchar el rechinar de los engranajes. Lo planificó todo.
1) Necesitaba un trabajo. Ahorraria algunos billetes. Tenia que comprar los materiales: Bolsa de dormir, para montaña. Carpa, mochila, linterna (una de verdad) Equipo térmico y algunos alimentos no perecederos. Todavia pensaba en una brújula.
2) Dedicaría un año a estudiar el arte de la supervivencia.
3) Compraría un pasaje en micro hacia el norte del país. Apartir de alli, haria lo que el destino le deparara y viviria con lo que la naturaleza generosa quisiera poner en su camino.
Tendria poco, pero ganaría mucho más. Realmente necesitaba todo eso? Porque lo que vería no tendria precio. El ser humano ES por sus experiencias. y ella iba a revolucionar su propia vida, porque podía hacerlo.
  Esa noche revivió en ella algo que hacia rato habia perdido: El espiritu de aventura, las ganas de vivir y la capacidad de asombro. Esas cosas por las cuales nos juzgan niños, cuando son ellos los que en su interior llevan a un ser maduro y despierto. Ella no quería ser adulta. Cuando crecemos es como si  cerraramos los ojos, porque no vemos más allá, no imaginamos, nos limitamos a lo que nos rodea. Crecer no es madurar, muchas veces es enceguecer.
Ella derribaria todas las paredes. Quería ver paisajes hermosos y conocer seres extraordinarios y no iba a perder un segundo más de su vida. El tiempo no se detiene a esperarnos.
Equipada con lo que mencioné dos parrafos arriba y con un cuaderno y lapicera, lo escribiria todo y así lo volvería inmortal. Balanceaba la posibilidad de agregar una filmadora, aunque eso seria romper con el parámetro que se habia puesto, de no llevar tecnología mas solo vivir de la naturaleza. Pero quién necesitaba parámetros a esas alturas?
En el invierno de ese año iria al norte y en el verano nadaría en lagos del sur y escalaría montañas y deslumbraria sus ojos con la blancura.
Entonces pensó que tal vez se sentiria sola y podria llegar a volverse loca en el silencio absoluto. Necesitaba música y libros. Una guitarra seria dificil de transportar. Buscaría entonces alguna comunindad y viviría entre ellos hasta que necesitara estar sola de nuevo. Porque como dije antes, ella era efimera. Iba y venia cuando quería y nunca se quedaba lo suficiente.
Pensó en su partida hasta quedarse ahora si finalmente dormida. Ya no con una lágrima balanceandose en el rabillos de uno de sus ojos y amenazamdo con secarse y quedarse en su piel para siempre sino con una sonrisa en los labios. Cuando amaneciera habria comenzado la Revolucion, la de su vida. Al fín tomaría las riendas. Porque ella una vez habia querido algo y habia olvidado qué. Pero en aquel preciso momento que ya habia pasado lo recordó y sus expectativas resucitaron. Ahora sabia lo que desaba y solo bastaba con alzar sus brazos y agarrarlo. Y no dejarlo ir nunca.

1 comentarios:

Jules. dijo...

Ami tambien me encantó tu blog, y las cosas que escribis son muy muy muy ^^
Me voy a pasar mas seguido a deleitarme con lo que escribis. Te mando un Beso =*

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